Jorge Monopoli, con su proyecto “Kalma Restó”, ganó la cuarta edición del “Prix de Baron B – Édition Cuisine”, la iniciativa de Baron B que busca destacar desde 2018 los mejores proyectos gastronómicos integrales de la Argentina por su excelencia y su visión transformadora. Se distinguió el trabajo que viene realizando como impulsor de la nueva cocina del fin del mundo desde “Kalma Restó” un pequeño y exclusivo restaurante que se convirtió en un referente de la zona con una propuesta gastronómica que se basa en la utilización y aprovechamiento de las materias primas que el entorno le ofrece durante las diferentes estaciones del año.
El proyecto “Kalma Restó” de Jorge Monopoli ubicado en Ushuaia, Tierra del Fuego, fue elegido como el proyecto ganador por Mauro Colagreco, Leonor Espinosa, Paz Levinson, y Martín Molteni.
En diálogo con Matices del Vino, Jorge analizó el premio, lo que implica para un restaurante de Tierra del Fuego y para la gastronomía federal de Argentina. Explicó las razones por las que considera que su proyecto ganó y el rol del vino en su cocina.
-¿Por qué consideras que ganaste este importante premio?
-Nos llena de orgullo y creo que llegar hasta donde llegamos porque hacemos un trabajo muy fuerte. Tenemos una diversidad de productos aquí en Tierra del Fuego que la verdad que es única. No hay productos así en el país y la verdad es que nos especializamos en el cuidado de él. Esto es todo lo que nos llevó a ganar, además de nuestra visión de sostenibilidad y de economías regionales. Desde la oscuridad del fin del mundo logramos llegar a la luz y estamos súper contentos.
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